Grabados



                                        ¿ QUE ES UNA ESTAMPA ORIGINAL?

    A  pesar del prestigio de Goya, Rembrandt o Durero, el grabado sigue siendo un desconocido para el gran público. Y peor aun: está rodeado de malentendidos que es bueno aclarar. El primero de sus problemas surge precisamente de su mejor virtud, de su capacidad de multiplicarse sin dejar de ser original. 
De una plancha hecha a mano por el artista se puede obtener cierta cantidad  que se numeran y se firman para garantizar la autenticidad de la edición. Sin embargo, marchantes inescrupulosos reinventan una y otra vez una abundantísima picaresca para confundir este proceso tan simple y obtener beneficios indebidos, generando daños difíciles de reparar.
Desgraciadamente se está convirtiendo en una practica fraudulenta habitual que algunos artistas e ilustradores pongan en el mercado reproducciones fotomecánicas de sus obras con la desfachatez de firmarlas y numerarlas.
Por otro lado, se dice algunas veces que el grabado es un arte menor en comparación con la pintura y la escultura. Semejante declaración sólo prueba que quien eso dice no sabe mucho de grabado, de pintura o de escultura. En efecto, una pintura es un acto creativo que el artista realiza con colores sobre una superficie; el escultor ejerce su acto de creación con materiales que le permiten formar volúmenes. 
Lo que sucede es que hay formas de creación directas y otra que no lo son. Cuando un escultor realiza una talla en madera o piedra está haciendo lo mismo que el pintor con sus colores sobre una tela: una obra directa sin más. Pero si ese mismo escultor se propone una obra en bronce la cosa cambia puesto que no lo hace directamente. Realiza un modelo en barro del que se obtienen los moldes que servirán para confeccionar un modelo de cera; de este se hacen nuevos moldes refractarios con los que se fundirán las piezas finales en el bronce definitivo. Se trata , por lo tanto de una creación indirecta. De la misma manera, el grabador crea su imagen en una plancha de metal, madera u otro material plano de la que salen luego las copias en papel mediante el proceso de estampación.
     Hasta aquí todo bien. El siguiente problema comienza cuando se confunden estampas originales con estampas fotomecánicas de las que ilustran habitualmente carteles, periódicos, revistas y folletos de publicidad. Estas últimas son meras reproducciones; las otras son, por fin, las " estampas originales" que tratamos de describir. En un caso se trata de productos que valen para su finalidad divulgadora y periodística, mientras que en el otro son verdaderas piezas de creación artística.
     Y es por eso que hay tantas técnicas que a veces confunden al observador desprevenido. Aguafuerte, aguatinta, buril, punta seca, xilografía, linograbado son solo algunas de las numerosas maneras de grabar, porque el artista necesita de todas esas técnicas ( y más si las hubiera) para poder expresar con la mayor generosidad sus intenciones estéticas. De la misma forma que el pintor o el escultor se valen del óleo, el pastel o la acuarela, del bronce, la madera o la piedra, según sea la idea que pretenden plasmar.
     En resumen, una " estampa original" es una imagen, generalmente sobre papel, impresa manualmente de una o varias planchas realizadas por el artista, quien ha elegido escrupulosamente los materiales y las técnicas a emplear para que el resultado final sea lo más fiel posible a sus intenciones. Una vez terminada la edición, se firman y numeran las copias y se destruyen o inutilizan las planchas para garantizar que no existan más copias que las firmadas por el autor.
         

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